Las alergias respiratorias no son más que manifestaciones del aparato respiratorio ante la intolerancia de una sustancia. Las más comunes son las del polvo, el polen, el moho o el pelo de ciertos animales y pueden aparecer a cualquier edad. El cuerpo actúa contra una sustancia determinada, el alérgeno y se manifiesta con congestión nasal, picor en la garganta o nariz, mucosidad, estornudos y tos y sibilancias.
En época de alergia respiratoria, muchas personas pasan dificultades para respirar con normalidad. Por ello queremos daros algunos consejos para sobrellevarlo de la mejor manera posible.
1º. Ventilación diaria
Si tienes alergia respiratoria, trata de pasar el día en un ambiente bien ventilado. Si estás en casa, es suficiente con ventilar unos 20 minutos a primera hora de la mañana, o a última hora del día para renovar el aire de tu hogar. Un ambiente poco ventilado o cargado puede ser perjudicial.
Una buena idea puede ser hacerte con un purificador de aire que mantiene a raya los ambientes cerrados como las oficinas o lugares cerrados. Algunos purificadores de aire eliminan casi por completo los alérgenos del aire.
2º. Alimentación adecuada para la alergia respiratoria
Una buena alimentación es clave siempre para prevenir enfermedades y en muchos casos puede ayudar a paliar los síntomas. Todo alimento que potencie las defensas propias del organismo puede ayudar a prevenir los síntomas de las alergias al encontrarse con un cuerpo más fuerte. Los alimentos ricos en antioxidantes como vitaminas A, C y E o minerales como selenio y zinc son perfectos para reforzar nuestro sistema inmunitario. Siguiendo una alimentación rica en frutas y verduras frescas y pescado, ayudas a tu cuerpo a protegerse.
Los grandes aliados de los alérgicos son la vitamina C y el ácido fólico, ya que tienen propiedades antiinflamatorias y por ello pueden, en los casos más leves, ayudar a aliviar las reacciones alérgicas como estornudos y picores.
3º. Evita los alérgenos
Esto parece obvio, pero no siempre somos conscientes de que nos exponemos a ellos.
Si tu alergia, por ejemplo, es al polen, te recomendamos:
- Evita los lugares que concentren más cantidad de polen: parques, jardines, entornos rurales.
- Usa gafas para protegerte los ojos y mascarilla en la calle. Cierra las ventanillas si viajas en coche.
- Si sales al aire libre, hazlo en las horas de menor concentración de polen, entre las 5 y las 10 de la mañana y las 19 y las 22 horas de la tarde.
- Trata de no tender la ropa en el exterior para evitar que se contamine.
- Elimina los restos de polen de tu ropa y cuerpo al llegar a casa con una ducha y lavando la ropa.
4º. Respiración correcta con alergia respiratoria
Una respiración correcta ayuda mejorar la capacidad pulmonar y el flujo respiratorio. Y más importante, reduce la frecuencia de las crisis relacionadas con las alergias respiratorias.
Puedes aprender técnicas de respiración muy diversas, algunas como el yoga o el mindfulness te pueden ayudar a combatir los peores momentos de dificultad respiratoria.
Claro está que todas estas pautas son solo una pequeña ayuda para la alergia respiratoria, pero siempre debes seguir las recomendaciones de tu alergólogo para combatir los síntomas de la alergia, ya sea de tipo respiratorio, alergia al frío, rinitis alérgica, alergia cutánea, etc.